Cómo volver a encontrar órganos eróticos o corazones no demasiado ametrallados.
O cómo disimular nuestro acento. nuestras marcas de guerra o sexo. nuestro miedo.
O cómo disfrutar de nuestro acento, de nuestras marcas, de nuestro miedo.
Cómo ser otros en otros lugares.
Cómo ser explícitamente extranjeros.
Ser completamente otros en otras camas.
Ser alumnas aplicadas con apuntes en alemán.
Ihre Anwesenheit hat das Format einer Abwesenheit.
Cómo perdonar la cobardía.
Cómo aprender los horarios de los trenes y la filosofía de los autobuses.
Cómo ser Berlín.
Con qué cara. Con qué palabras. Cómo volver en cinco días
a Valladolid.
2 comentarios:
"O cómo disimular nuestro acento. nuestras marcas de guerra o sexo. nuestro miedo."
♥
La que se va nunca es la misma que la que vuelve. Y eso es bueno, creo.
te entiendo, berlín es una enfermedad,una vez dices Osbanhof Alexanderplatz ya no puedes parar...
Publicar un comentario