esta entrada se podría titular "nadie lee blogs en navidad o cómo el escritor se siente sucio porque su lector es feliz junto a su familia y no necesita belleza ni drama si tiene un pavo relleno y salsa de arándanos esperando en la mesa. también regalos debajo del árbol encendido (a todos nos hacen ilusión los regalos). posiblemente haya libros".
nadie quiere el frío de las palabras gastadas y podridas. es más acogedor el calor de la chimenea, son más acogedoras las ramitas de muérdago, los papanoeles colgando de las ventanas y el calor, el calor, cuando fuera está helando. el escritor también quiere zapatillas llenas de objetos. porque el escritor es un materialista, un fetichista del papel de regalo. y también le encantan las luces colgando de las farolas de la avenida.
el escritor que mantiene un blog piensa: no merezco ese pedazo de atención, mi entrada no vale nada, hay tanto que leer por ahí... voy a dejar a mi lector tranquilo, que se recree con otras voces, con otros labios más carnosos, con otros sexos. que fornique. que folle con sus novias o sus novios , con sus escritores y escritoras preferidos, mientras escucha una balada triste... que escuche villancicos aburridos y deprimentes mientras le chupan la tromp(et)a. caetera. que vaya a muchos no-lugares, a centros comerciales, al cine, y que se encuentre con antiguos compañeros. que las navidades están para eso, joder, para sentir.
el escritor se está masturbando porque sí, por puro aburrimiento. piensa en que el lector ya no busca sus palabras y se toca mientras piensa en él. desposa la cama. solo.
córrete, lector, leyéndome. córrete como se corren las muchachas perdidas con versos de Sexton debajo del edredón roído. en navidades blancas. estoy desnuda y sola y me siento muy sucia, piensa la escritora. tú que me lees...quiéreme como si me desearas. hazme blanca la navidad.
La foto es de Charlotte Ballesteros.
15 comentarios:
hey, yo sigo leyendo en Navidad, aunque estoy borracho. borracho siento una completa indiferencia hacia qué hacer y qué no hacer, aunque creo que serías una buena decisión también si estuviese sobrio.
eso que dices de masturbarse por puro aburrimiento me ha dado una gran idea (si cuando me esté corriendo me da tiempo a cambiar de pestaña a lo mejor te hago caso)
En navidad todo es complicado. Hay gente que se va de vacaciones a cualquier otro lugar, otros viajan de visita a la familia, otros simplemente aprovechan el tiempo libre para hacer todas esas cosas pendientes que quisieron hacer y no pudieron por falta de tiempo... Y se quedan sin tiempo para visitar blogs.
Un beso
una placentera reflexión.
abrazo,
g.
gracias por las muestras de cariño, aunque algunas se pasen de cariñosas.
Yo te sigo leyendo ya sea en navidad o en vacaciones de verano.
Todos los escritores tenemos algo de fetichistas, para qué negarlo...
Por cierto gran escrito, me gusta ese toque "sucio" y directo con el nos deleitas en esta entrada.
Un abrazo, nos leemos.
Efectivamente ha habido libros debajo de árboles, jeje
Las navidades no siempre son placenteras para todos. Navidad y soledad terminan en lo mismo, y a menudo la Navidad empieza tambien con soledad.
Un blog (como el tuyo) es lo más interesante que hay para leer en estas fechas. Todo lo demás es Navidad...
sucia, sucia quería ser, daniel.
pues gracias, rubén. "esto no es otro típico post sobre navidades" podría llamarse. un beso.
Desnuda.
De madrugada.
Sucia y sola.
Hilando palabras.
como sexton :)
qué grande sexton, coño!
hay quienes hacemos lo mismo todo el año, incluso quien escribe con la certeza de que nunca lo van a leer, tiene que haber de todo
bueno, ese aspecto del texto viene para decir otras cosas... no es un ensayo sobre lo que la gente hace en navidad ni lo pretendo. este texto es otra cosa. pero gracias por visitarme.
Pronto volveran sin duda, despues de la pasion con la que los añoras y les escribes...
sí, supongo que volverán los que creen que hablo de mí en este texto.
...Mademoiselle Tormenta: rendido quedo (y te guiño un ojo cómplice)...
;-)
tampoco es pa' tanto. un abrazo.
Publicar un comentario